4 de julio de 2009

Un aparte de Brida ....

Para mi Wicca...


(decidí transcribirlo yo misma de mi libro original, pues necesito que estas letras queden grabadas para siempre en mi memoria)

....[] Aquella noche tuvo un lindo sueño, con mares e islas cubiertas de árboles. Se despertó de madrugada y se alegró de que Lorens estuviera durmiendo a su lado. Se levantó y fue hasta la ventana de su cuarto, a mirar Dublín adormecido.

Se acordó de su padre, que acostumbraba hacer esto cuando ella se despertaba con miedo. El recuerdo también trajo otra escena de su infancia.
Estaba en la playa con su padre, y él le pidió que probara si la temperatura del agua era buena. Ella tenía como 5 años y se entusiasmó de poder ayudar; fue hasta la orilla y se mojó los pies.
- Metí los pies, está fría - le dijo.
El padre la tomó en brazos, fue con ella hasta la orilla del mar y sin ningún aviso la tiró dentro del agua. Ella se asustó, pero después se divirtió con la broma.
-¿Cómo está el agua? - preguntó el padre-
-Está buena - respondió.
-Entonces, de aquí en adelante, cuando quieras saber alguna cosa, zambúllete en ella.

Había olvidado esta lección con mucha rapidez. A pesar de tener solamente 21 años, ya se había interesado por muchas cosas y desistido con la misma rapidez con la que se entusiasmaba por ellas. No tenía miedo a las dificultades: lo que la asustaba era la obligación de tener que escoger un camino.
Escoger un camino significaba abandonar otros. Tenía una vida entera para vivir, y siempre pensaba que quizá se arrepintiera, en el futuro, de las cosas que quería hacer ahora.

"Tengo miedo de comprometerme", pensó. Quería recorrer todos los caminos posibles, e iba a acabar no recorriendo ninguno.

Ni siquiera en lo más importante de su vida, el amor, había conseguido ir hasta el final; después de la primer decepción, nunca más se entregó por completo. Temía el sufrimiento, la pérdida, la inevitable separación. Claro, estas cosas estaban siempre presentes en el camino del amor y la única manera de evitarlas era renunciando a recorrerlo. Para no sufrir, era preciso también, no amar. Como si, para no ver las cosas malas de la vida, terminase necesitando agujerearse los ojos.

"Es muy complicado vivir."

Había que correr riesgos, seguir ciertos caminos y abandonar otros. Se acordó de Wicca hablando de las personas que siguen los caminos tan sólo para probar que no sirven para ellas. Pero esto no era lo peor. Lo peor era escoger, y pasarse el resto de la vida pensando si se escogió bien. Ninguna persona era capaz de escoger sin miedo.

No obstante, ésta era la ley de la vida. Esta era la Noche Oscura, y nadie podía huir de la Noche Oscura, aunque jamás tomase una decisión, aunque no tuviese valor para cambiar nada; porque esto en sí ya era un decisión, un cambio. Y sin los tesoros escondidos en la Noche Oscura.

Lorens podía tener razón. Al final se reirían de los miedos que tuvieron al comienzo. Tal como ella se rió de las serpientes y escorpiones que colocó en el bosque. En su desesperación no se había acordado de que el santo patrono de Irlanda, San Patricio, había expulsado a todas las serpientes del país.

- ¡Qué suerte que existes, Lorens! - dijo bajito, por miedo a que él la oyese.

Volvió a meterse a la cama y el sueño vino rápido. Antes, no obstante, recordó otra historia más con su padre. Era domingo y estaba la familia reunida comiendo en casa de su abuela. Ella ya debía tener unos catoce años y estaba quejándose de que no conseguía hacer determinado trabajo para la escuela porque todo lo que empezaba a hacer temrinaba mal.

- Quizás estos fracasos te estén enseñando algo- dijo su padre. Pero Brida insistía en que no; que ella había entrado por un camino equivocado, y ahora no había más remedio.

El padre la tomó de la mano y fueron hasta la sala donde la abuela acostumbraba a ver la televisión. Había allí un reloj de pie, antiguo, que estaba parado desde hacía muchos años por falta de piezas.
- No existe nada completamente errado en el mundo hija mía -dijo el padre, mirando el reloj-. Hasta un reloj parado consigue estar acertado dos veces al día.

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1 comentario:

  1. Que bueno es leer y recordar perfectamente la razón por la que uno escribió algo !!

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